miércoles, marzo 31, 2004

Schiale, tal vez sí haya pasado demasiado tiempo.
Todas mis estúpidas ilusiones, resurgidas de la tumba de los recuerdos, se fueron al carajo bajo la leyenda "El número que usted marcó, está fuera de servicio. No es necesario que lo reporte al 050".

lunes, marzo 29, 2004

Fate

Hace como 6 años llegué un poquito tomadito a un bar de trova, entré con un par de amigos, nos sentamos cerca de la puerta y no pudimos dejar de ver a un grupo de niñas que se veían muy bien desde ahí a un par de mesas de distancia.

La peda prosiguió su curso normal; o sea que nosotros nos dedicamos a tragar alcohol como locos mientras que entre trago y trago, volteabamos a ver a las chavas, con la esperanza netamente masculina de que ellas se acercaran a nosotros y nos dijeran "nos gustan"; como siempre, eso nunca sucedió. Pero lo que sí sucedió fue que alguien me llevó a la calle, no sé por qué, y cuando iba subiendo las escaleras hacia mi mesa, vi a la más bonita de las vecinas llorando con sus amigas. Yo como siempre que veo a una mujer llorar, me conmoví; tal vez más de lo debido a causa del etil mezclado con la trova cubana; y fue tanto así que mi característica timidez me importó un cacahuate y fui a hablarle

- ¿Porqué lloras? ¿Quién te hizo algo? ¿Lo madreamos?
- No, no importa, nadie me hizo nada.

Sonrió y me vio con esos grandes ojos tiernos, estiró su mano y me tocó el brazo

- ¿Vas a estar bien?
- Yo creo que sí. Dijo intentando sonreír y luchando visiblemente contra su llanto sin soltar mi brazo, después abrazó a su amiga y siguió llorando. Sus amigas le decían "Ya, deja de llorar B. No vale la pena"

Aaaaah, con que se llama B. Me fui a mi mesa, tomé un par de cartuchos de valor más y fui a las escaleras de nuevo, un poco nervioso por no encontrarla, pero sí, seguía ahí.

- ¿B? Ya no llores, es más, si dejas de llorar te regalo mmmmmm.... (en ese momento inció la lucha de mi diablo vs. mi angel --dale tu collar hippie nuevo-- nel no mames, ni la conoces, no le des nada, no seas guey---dáselo cabrón, algo que te guste---nel que se de por bien servida que dejaste de chupar por venir a ver porqué chingados chillaba--- no no mames, guey, vela, está hermosa, no mames, qué te va a pasar si le das tu mugroso collar, igual y le late y hasta deja de llorar--)...si dejas de llorar te regalo, mmmmm... mi...mi...mi...mi collar hippie.

Me lo quité del cuello y se lo ofrecí

--¡No! ¿Cómo crees?
--(No madres, ahora te lo quedas) Sí, ándale. Pero ya no estés triste.

Lo tomó y no sirvió de mucho, pues siguió llorando. Mi diablo se mió de risa, mi angel se ardió y empecé a ofrecerle todo lo que traía encima: mi protector de labios, mis pulseras de cueritos, mis estampitas del mundial, una tarjeta mía, una tarjeta de teléfono, etc. Todo se lo di y al menos empezó a reír (Angel a diablo: ¡tómela pendejo!)
Le pedí como por la décima vez que dejara de llorar y en ese momento, una lágrima hermosa, bajó de su ojo y acarició su mejilla y esa escena me trajo a la mente un poema de Jaime Sabines, Horal, que a la fecha no puedo sacarde mi mente cuando veo a alguien llorar.


El mar se mide por olas,
el cielo por alas,
nosotros por lágrimas.

El aire descansa en las hojas,
el agua en los ojos,
nosotros en nada.

Parece que sales y soles,
nosotros y nada...
J. Sabines

Me fui o se la llevaron, no me acuerdo bien.

Pasó mucho tiempo y un día cuando llegué a casa, me dijeron - te habló una niña que se llama B, te dejó su teléfono -. Entré en shock, no pude dejar de imaginar mil y un cosas, el estilo de mi smoking y como me vería en el altar, a quien iba a invitar a la boda y pensando y pensando el tiempo pasó y pasó. Así, otro día que detuve mi imaginación, le marqué pero había pasado demasiado tiempo y yo no me di cuenta. Ella se había ido del país por un año.

Aventé su teléfono por ahí y así terminaron todas las fantasías y la historia color de rosa, o al menos eso pensaba yo, porque hace algunos días estaba buscando algo en mis cajones y entre las ratas y las arañas, encontré un papel doblado, algo amarillento, lo desdoblé y vi un número que me sonó muy familiar y debajo del número decía "B"... me quedé mirándolo como imbécil, pretendiendo que no sabía de que se trataba, pero lo sabía; no quería dejarme llevar de nuevo, aunque era demasiado tarde. No sé si marcar o no, tal vez ni siquiera sea su teléfono ya, tal vez haya decidido quedarse a vivir allá en dónde estaba... No sé qué hacer, me caga la situación...

miércoles, marzo 24, 2004

Fresas vs. Alternos

Si algún adolescente lee este titulo, tal vez se muera de risa de leer unas palabras tan fuera de moda como "fresa" y "alternos". La verdad es que no tengo idea de como definirlos ahora; cuando yo era adolescente, los llamabamos "alternos" porque estaba de moda la "música alternativa", que no era ni heavy metal, ni pop, era simplemente música alternativa y por supuesto que tenía sus vertientes, de las cuales resaltaba el grunge y a los fresas los llamabamos así seguramente por influencia de nuestros padres.

Yo siempre fui fiel a mis creencias heavy-metal, pero el grunge tenía algo chido que me llamaba, así que abrí un poco mi estrecho juicio y los acepté, a final de cuentas los músicos grunge tenían la misma actitud de enfant terrible que los metal-boys.
La diferencia entre la gente "alterna" y los fresas, como siempre, residía en su manera de vestir y de pensar.

Los niños fresas tomaban paris de noche, los alternos chelas. Los fresas escuchaban OV7, los alternos Pearl Jam y siempre existió una guerra fría entre ellos, aunque en realidad casi todos pertenecían a la misma clase social (media-media alta-y para arriba). Los alternos no bajaban de pendejos y vacios a los fresas y rechazaban todo aquello que sonara a comercialización, siendo privilegiados por su preferencia aquellas bandas, comidas y fetiches que fueran de sellos independientes.
Los fresas no bajaban de "mugrosos" y jodidos a los alternos y por supuesto eran fieles a sus marcas de main-stream.

Este apego a las marcas independientes y de mainstream regían nuestra conducta adolescente, los lugares a dónde ibamos, las cosas que comíamos, la ropa que escogíamos y los lugares en dónde comprábamos y por supuesto, la gente con la que nos juntábamos.

Yo pertenecía, o al menos eso intentaba, a la banda alterna-ruda (o sea alterna pero con más heavy que grunge) y cuidadito y alguien osara querer poner una rola de pop en nuestro carro, que un amigo nuestro - que por supuesto era alterno- fuera cachado bailando o cantando alguna de esas porquerías pop que eran sólo para mariquitas.

Una vez conocí a una chava fresita, que me encantó; no sólo era bonita, sino que además era de mente abierta, pensamiento crítico, humor sarcástico, etc. Era casi perfecta, su problema era su fresismo y como yo no estaba dispuesto a vivir una versión neoliberalista de Romeo y Julieta, mejor la saqué de mi corazón vomitando como loco cerveza y charanda, mientras Nirvana me gritaba "smells like teen spirit".

Al parecer no vomité lo suficiente porque ella siguió dando vueltas en mi cabeza y eso me hizo poner en perspectiva todos mis ideales de rudeza; ella era maravillosa, tanto que merecía ser ruda, pero eligió ser pop. Entonces tuve que decidir una vez más entre obedecer a mi corazón o seguir mis leyes de conducta, y una vez más, elegí la segunda.

Los fresas nos caían tan mal por su pensamiento cerrado, por su poca aceptación y tolerancia, cosa que nosotros pensabamos que teníamos de sobra: "Nosotros somos open-minded bro', somos -prohibido prohibir-". Y realmente era de risa la manera en que los fresas actuaban, pero ¿en realidad acutaban tan diferente a nosotros? ¿Eramos en realidad tan open minded?

La respuesta me golpeo un día en mi carro, mientras admiraba el solo de guitarra de una canción pop: Nosotros somos igual o más pendejos que los fresas, yo creo que más, por que al menos ellos no promulgan por los mil vientos que son tolerantes y que aceptan a todo el mundo; nosotros sí y sin embargo no lo somos, cualquier cosa que nos huela a algo que no cae dentro de nuestro círculo es excluída. Somos intolerantes y cerrados, somos unos fresas en sentido inverso...y en ese momento, empecé a abrir mi estrecha mente.

Conocí a mucha gente que se daba cuenta de lo mismo, y empezabamos a aceptar realmente a todo el mundo y tuvimos diversidad y conocí a personas maravillosas sin la atadura de sus gustos, de su forma de actuar, incluso comencé actividades que antes ni siquiera hubiera imaginado hacer (por supuesto que no bailar ballet, eso sí es de mariquitas, jajajajajja no es cierto).

Me di cuenta de que había gente en los dos bandos que no era radical y también vi que había más de dos grupos y supongo que en ese momento di un paso más en mi escalera de madurez que tanto me caga subir, jajajaja.

Seguramente que pasar por esa etapa de fanatismo es algo normal, en lo que buscas tu identidad y todo ese tipo de cosas de las que hablan los psicologos, lo que es verdaderamente triste es que personas grandes sigan siendo tan fanáticos y cerrados sin darse cuenta y creyendo que están bien, y el pedo mayor es que muchos de ellos son nuestros directores de empresas, nuestros directores de escuelas, nuestros dirigentes políticos, en fin. Ni pedo, no nos queda más que alzar nuestra voz y manifestar nuestro descontento, tal vez suene idiota y romántico, pero seguro que si todos lo hacemos podremos hacer de nuestro planeta un mejor lugar para vivir.

lunes, marzo 22, 2004

Siguiendo con los tatujes...

También me comentó mi buen amiguito: ¡¡Traer un tatuaje es como comprarte una playera chingona, !! ¡¡La tienes que presumir!! Pero eso aplica sólo para los tatuajes cuya finalidad es precisamente el ser mostrados, ¿pero qué pasa con los tatujes íntimos? ¿Si te compras una tanga de zebra para enseñarsela a tu vieja, se la vas a enseñar a todo el mundo?

viernes, marzo 19, 2004

TATUAJES



Todo el mundo sabe que es un tatuaje, pero el problema viene cuando se habla sobre su significado.
Yo pienso que el significado es una circunstancia subjetiva, "One man'sfun is another's hell".
Por ejemplo, un adolescente junta unos cuantos domingos y se hace un tatuaje rockero, con calaveras ensangrentadas y demás cosas MEROL, en ese momento su tatuaje simboliza su rebelión contra el mundo social, los adultos, etc. De hecho, el mismo acto de tatuarse es en sí un acto rebelde, por lo que todo lo demás va implícito.
El tiempo pasa y aquel adolescente tatuado entra al aro, como casi todos lo hacemos. Ahora trabaja, gana un buen billetito y sobre todo, tiene un estatus diferente. Le empieza a preocupar la visión que tienen los demás de él y el rol que juega dentro de su circulo social. Tiene una novia linda a la que le chocan los tatuajes porque "son así como medio gatos, ¿no?"
Ese punto hace que su tatuaje sea ahora, pará él, un estorbo, un grave error de su juventud, jajajaja.
Pasa el tiempo y la chava lo deja, por lo que sea, un güey con un Audi, un güey más mamado, un güey más carita, un güey más pendejo y más feo, por lo que sea; y entonces sus calaveras recobran sentido.
"A huevo, pinche vieja vale madres, si ni mi tatuaje le gustaba, mi tatuaje soy yo..."
Tal vez cuando sea un adulto por completo y esté casado y con hijos, decida dejárselo para recordar que de joven se cometen errores, o puede ser también que ni le ayude ni le estorbe, sino todo lo contrario. Se me ocurre pensar en él jugando con sus hijos con el tatuaje descubierto, diciendole a sus niños: Si no se van a dormir, mi calavera se los va a comer... jajajajaja, ok, eso fue muy de película 80'tera gringa, pero puede ser, ¿no?
Bueno, esa historia tiene las opciones que uno quiera en cuanto al significado de los tatuajes. Un tatuaje significa lo que uno quiera o sienta que debe de significar, y ese significado depende de muchas cosas como el lugar dónde uno se lo ponga, la figura que uno se ponga, etc. Porque no es igual de agresivo ver a un tipo con un águila tatuada sobre el hombro al más puro estilo renegado, que a un tipo de tepis con dos lagrimitas sobre la cara tatuadas. Así como tampoco es lo mismo ver a una chavita en el antro con una lagartijita subiendo por su abdomen desde su ingle que ver a un expresidiario con una leyenda sobre su ingle "Aqui estuvo tu mamá".
Además también intervienen otro tipo de cuestiones en los tatuajes, como el uso que le daremos.
Supe de un señor cuyo hijo murió y entonces decidió tatuarse la cara de su difunto chamaco sobre su espalda, ese señor probablemente sienta una gran nostalgia cuando vea su espalda o qué sé yo, qué diablos sentirá, es como una playera de esas que había en los ochentas de reino aventura con toda la familia estampada, pero a lo cabrón y para siempre.
Pero hay otros casos como uno de una chava de 17 años que se quería ver "hot as hell" y se tatúo un trival en su abdomen ( la neta sí logró su cometido). Pero bueno, la niña tenía un cuerpazo, digamos que esa fue la cereza en el pastel. ¿Qué tal un chavo que se tatúa un vampiro trivalizado en un brazo? se quiere ver cabrón: lo logra. Ese tipo de tatuajes son para presumirse, para mostrarse (no el del señor, tal vez.) pero hay tatuajes de funciones más íntimas, que son un pedacito de la vida de alguien y tienen un significado más etéreo y pueden ser grandes o pequeños, blanco y negro o a colores, no importa. Ese tipo de tatujes generalmente son para siempre y viven en simbiosis con su portador, por lo que es obvio que a veces sientan bien tenerlos, a veces no; digo, la condición humana es no estar conforme, ¿no? El flaco quiere engordar, el gordo enflacar, el chino ser lacio y el lacio...pelirrojo. Además estos tatuajes pueden estar en cualquier parte del cuerpo, pero yo me inclino porque estén en lugares inaccesibles a simple vista, así ellos tienes el control de quien quieren que lo vea, quien vale la pena que lo haga y quien no.

Los tatuajes de "show-off" yo creo que se hacen generalmente a los 15-18, los de significado más íntimo pueden ser en cualquier parte de tu vida adulta o adolescente.

Hay gente a la que le gustan, hay gente a la que no, ¿Qué le podemos hacer? Afortunadamente con tanta mamada cosmetológica que sacan ahora, no hay mayor problema en quitártelo con laser 3 días antes de tu boda. Entonces ya no hay tanto fondo en que "un tatuaje es para toda tu vida".

jueves, marzo 18, 2004

En mi oficina hay una tipa que piensa que ser considerada como cagante es súper cool. Pobre idiota, ¿Qué tipo de aspiraciones puede tener una persona que encuentra grandes satisfacciones en ser nefasta?
Pero su problema es mucho más grande que ese, ella es una persona que, puedo apostar sin temor a fallar, es llamada la mayor parte de las veces "señora". Como todas las individuas solas de esa edad (que rondan los 35 en adelante), ella jura que apenas cumplió los 30; sí, como no. Hablo de "ellas", porque mi experiencia me ha dicho que en las mujeres es mucho más fuerte la presión de la soledad, del fracaso que socialmente implica (al menos eso les han hecho creer a la mayoría) el estar sola a los 30 años. Y no es tan descabellado si uno se pone a pensar que las mamás de estas "señoras" a su edad ya tenían como 3 hijos a punto de terminar la primaria.
Bueno, pero volvamos a ella: fisicamente no tiene mayor gracia que unos enormes senos, que por cierto tuvo que reducir porque le causaban problemas a su columna, es de complexión más bien ancha y toda la vida está tomando laxantes, hace dietas de caballo en las que deja de comer por días, toma cualquier cantidad de pastillas que se auto receta, en fin. Su lugar parece una farmacia, naturista, eso sí, pero al fin farmacia. Su aliento es fetido, supongo que se debe a todo lo que toma en vez de comer. A pesar de sus grandes sacrificios de inanición, los resultados son ridículos. Sigue tan o tal vez un poco más obesa que cuando yo la conocí hace 3 años.
No dudaría que cuando nadie la ve, se atiborre de gansitos, papitas o cualquier pendejada por el estilo; de hecho, me parece que en su cajón del escritorio guarda paquetes familiares de galletitas y diversas golosinas que compra muy baratas por mayoreo en Garis, o cuando consigue una tarjeta con sus múltiples amistades (creo que tiene dos amigas nada más) en el Sam's.
Por lo general se viste con grandes escotes para atraer la vista a sus senos y que así la gente no se fije demasiado en su celulitis que traspasa la gruesa mezclilla que al menos 3 veces por semana trae. No puedo dejar de reconocer que es un brote de brillantez el esconder sendo defecto de esa manera, así como tampoco puedo negar que yo también los veo...bueno, para eso lo hace, ¿no? Yo simplemente cumplo mi parte: ver.
Ella vive sola, su familia es de una ciudad del norte del país, por alguna extraña razón, vino aquí y parece que desde que llegó (me parece que son 7 u 8 años) se ha consagrado a esta empresa, la cual le corresponde dicha consagración con gestos amistosos como soportar su mal genio, sus caras largas, su altanería en general. Si yo fuera alguno de los dirigentes de esta humilde empresa, por el bien de la misma, la "hubiera dejado ir" hace ya algún tiempo. Pero todo tiene sus porqués de más fondo, de mucho más fondo.
Su casa es de esas típicas casa de señora con mal genio, adicta al orden y a la limpieza. No es de extrañarse que su tapicería sea de color blanco (¿Qué otro color podría escoger una obsesiva del orden y la limpieza?), en su baño, cada artículo tiene un lugar especial que nunca está fuera de lugar y estoy seguro de que le tiene sierta repulsión a los hombres "por que orinan la taza cuando van al baño". Es muy poco común que ella invite a alguien a su casa, odia a los niños "por desordenados" y como buen animal uraño, defiende su madriguera por encima de toda ley social de convivencia, por lo que no tiene pelos en la lengua cuando tiene que decirles a las desdicahdas madres que sus hijos ensuciaron toda su sala con sus zapatotes mugrosos.
Recuerdo que una ocasión me platicaba sobre sus amantes, o creo que ella les llamó novios. Uno de ellos era uno de los dueños de la empresa, quien se la anduvo tirando por cierto tiempo (de ahí surge una teoría más que comprobada: un hombre caliente actúa de maneras impensables hasta saciar su calentura, o hasta estar tan cansado intentándolo que mejor regresa a casa. Por supuesto que yo no me escapo de dicha premisa), eso me hace pensar en un motivo para que la empresa sea tan condecendiente con ella. Otro de sus novios fue un tal Ma; este tipo, al igual que el empresario, jefe y amigo mío, se casó al poco tiempo de cortar con ella. Ellos dos, antes de casarse la fueron a buscar para tirarsela y ella al parecer se negó; tiempo después, ya casados, la fueron a buscar de nuevo y ella accedió.
La pobre se regocijaba diciendo "a huevo, pobres pendejos, como su vieja está de la chingada, vienen a buscarme a mí". Yo por supuesto tengo otra teoría: ¿Quién te ofrece la ventaja de "cogerte a una chichona", que es fantasía de más de uno, aunque esté gorda, celulítica y sea sumamente castrosa. Carajo, un hombre puede hacer lo que sea a cambio de un poco de sexo, incluso aguantarla a ella. Ahora bien, también tiene otras ventajas dicha individua; no tienen que pagar hotel, por lo que también se pierde el riesgo de entrar y salir del mismo y que alguien conocido te vea, o sea, no sólo es un ahorro monetario, sino también de riesgos innecesarios. Pero ella piensa que es por su linda cara...
Alguna otra ocasión me comentó acerca de un "ex" que también se iba a casar, me dijo: segurito que al mes ya va a estar buscándome, así pasa siempre...sin palabras.
Al menos ese tipo de actitud que le causa cierto placer aparente, no fastidia a las demás personas.
Tiene una amiga, que es casada y tiene dos hijas pequeñas, como de 13 y 10 años. La señora es una tipa liosa y metiche, se cree tan esotérica y además tiene la extraña capacidad de saber como es una persona con sólo verla...wow. Jajajaja pobre imbécil, el problema no se queda ahí, sino que gente más imbécil aún, como la de mi oficina, creen firmemente en todo lo que ella dice. ¡Ay Dios!
La chica de mi oficina, a la que llamaré S, satisface sus instintos maternales con las pobres hijas de la psiquica; me imagino que han de gozar de grandes momentos de felicidad teniendo dos madres. La pobre S viene luego a contarnos con gran gravedad como regaña a las hijas de la psiquica, y como libra grandes disputas con las pobres adolescentes, pero sobre todo como, ella, siempre se impone. La patética S piensa que se gana tanto la admiración y cariño de las niñas.
Pero no vayan ustedes a pensar que el papel de S se queda ahí, cuando las ve, ¡No!, ese papel la sigue por todas partes y no la suelta y nosotros que sí creemos en las leyes de la convivencia, tenemos que escuchar su estúpida plática, llena de tonos de autoadmiración, y de burda picardía.
Ahora conocí una nueva faceta de esta peculiar bacteria: la intriga. Pero de cómo la descubrí hablaré otro día.
Bueno, leyendo esto, surge una pregunta: ¿Cómo siendo esta mujer, tan patética como es, le dedico tantas líneas? La respuesta es compleja y toca varios puntos, entre los principales están los siguientes: Para un observador, ella es de las que más características presenta, y es divertido pensar que no puede llegar más abajo y siempre, siempre hace algo que muestra lo contrario, no puedo negar que tengo cierta curiosidad sobre a dónde vaya a terminar esta mujer. Otra razón es que a veces el trabajo es tan aburrido o simplemente no hay y entonces, tengo que observar a mis compañeros de trabajo, de los cuales ella sobresale por las razones antes expuestas y otra más es que me gusta escribir y ahorita me dio la gana de escribir sobre ella, tal vez más adelante escriba sobre los demás seres que habitan esta oficina para que vean que ninguno es tan ridiculamente divertido.
Desde que leí sobre la señorita masturbación y conocí esta madre del blog, la idea no me ha dejado tranquilo, así que decidí hacer mis propios blogs ¿Para qué? Pues tal vez para usarlos como post-its. Para contar pendejada y media que nadie leera, para ser voyeur de mí mismo. Una mirada a lo que pienso cuando no pienso en nada (chale, eso sonó bien Joaquin Sabina).
Tal vez sea una buena idea contar sobre los toquines de los viernes, sobre mis propias incursiones como barman, sobre mis miles de ligues fallidos, sobre mi oficina ¿Qué se yo?
Ya veremos poco a poco lo que este blog va escupiendo.
adopt your own virtual pet!