Hermanas
Nunca has podido enfrentar las cosas tú sola, pero de ahí a que te defienda tu hermana porque te compró el cuento de que eres una víctima...bueno.
Podría escribir un libro sobre lo absurdo y ridículo que es que precisamente ella te defienda, precisamente a ti, pero no vale la pena. Es más, estas palabras escritas aquí son un desperdicio, incluso para ti.
Adiós nociva mentirosa. Adiós para siempre adiós.