VIDA
Como todas las tardes y todos los dias, no sabia que hacer para pasar el tiempo, existir, existir. Eso me hace sentir que cada noche es una gran meta, el dormirme es mi trofeo "logre terminar un dia mas!!! por fin!!!" pero es un dia mas o un dia menos? no lo se, tal vez al final lo sabre.
Iba buscando y buscando, la gente pasaba a mi lado, el vagabundo frances me pedia dinero y al ver su bote lleno de monedas no me parecio mala idea para mi tampoco, tenia hambre y algunos centavos en mi bolsa. De pronto surgio entre la llovizna y la gente acosutmbrada a ella el edificio de la libreria "les 3 epices" entre, no por ganas, sino por no encontrar nada mejor que hacer. Subi las escaleras, libros y libros, nada latinoamericano, nada real. De pronto la seccion de discos, me puse la diadema para escuchar un cd, ni siquiera me fije cual era, no me importaba a menos que fuera muy malo me fijaria cual era para no comprarlo nunca.
Comenzo la guitarra portuguesa a sonar a romper el silencio y a tocar algo en mi, otra vez senti esas ganas de tocarlo yo, o mas bien las ganas de ser capaz de tocar algo asi, mejor dicho de crear algo asi y el lanto de una mujer que cantaba me dejo frio, tire mi portafolios y no se si cerre mis ojos o no, pero me vi en una habitacion oscura y tocando la guitarra portuguesa llorando con ella, llorando y sintiendo y ella sentia conmigo y me hacia sentir mas y asi los dos, creabamos musica y ella decia exactamente con su voz lo que yo sentia: soledad, desesperacion y despues resignada, como yo decia con su hermoso portugues "Ai vida", lo decia con ternura y aferrandose a ella, a pesar de lo que sufre, a pesar de lo sola que se sentia y entonces llorabamos los dos pero viviamos con un "ai vida" que yo no decia solo pensaba y yo seguia tocando y ella llorando. Al fin aliviados, terminamos. Deje la diadema y regrese a la libreria, sali a la lluvia nuevamente, aliviado, a seguir buscando que hacer hasta que terminara el dia.
Iba buscando y buscando, la gente pasaba a mi lado, el vagabundo frances me pedia dinero y al ver su bote lleno de monedas no me parecio mala idea para mi tampoco, tenia hambre y algunos centavos en mi bolsa. De pronto surgio entre la llovizna y la gente acosutmbrada a ella el edificio de la libreria "les 3 epices" entre, no por ganas, sino por no encontrar nada mejor que hacer. Subi las escaleras, libros y libros, nada latinoamericano, nada real. De pronto la seccion de discos, me puse la diadema para escuchar un cd, ni siquiera me fije cual era, no me importaba a menos que fuera muy malo me fijaria cual era para no comprarlo nunca.
Comenzo la guitarra portuguesa a sonar a romper el silencio y a tocar algo en mi, otra vez senti esas ganas de tocarlo yo, o mas bien las ganas de ser capaz de tocar algo asi, mejor dicho de crear algo asi y el lanto de una mujer que cantaba me dejo frio, tire mi portafolios y no se si cerre mis ojos o no, pero me vi en una habitacion oscura y tocando la guitarra portuguesa llorando con ella, llorando y sintiendo y ella sentia conmigo y me hacia sentir mas y asi los dos, creabamos musica y ella decia exactamente con su voz lo que yo sentia: soledad, desesperacion y despues resignada, como yo decia con su hermoso portugues "Ai vida", lo decia con ternura y aferrandose a ella, a pesar de lo que sufre, a pesar de lo sola que se sentia y entonces llorabamos los dos pero viviamos con un "ai vida" que yo no decia solo pensaba y yo seguia tocando y ella llorando. Al fin aliviados, terminamos. Deje la diadema y regrese a la libreria, sali a la lluvia nuevamente, aliviado, a seguir buscando que hacer hasta que terminara el dia.
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